Inquieto, hábil y con la capacidad de generar nuevos procesos de trabajo innovadores. Así son los intraemprendedores, un perfil necesario en cualquier organización. Y es que los intraemprendedores son profesionales con espíritu emprendedor, que aprovechan su potencial para mejorar e innovar en la empresa en la que trabaja.
Mientras que el emprendedor decide montar un negocio, y generar dinero a raíz de su actividad, el intraemprendedor aplica esta misma base para desempeñar sus funciones en favor de la organización para la que trabaja.
Entre las características principales de este perfil profesional se encuentra la de proponer nuevas líneas de negocio, innovar procesos internos para hacerlos más productivos y aportar mejoras en diversos ámbitos. El objetivo en este sentido es el de aumentar la rentabilidad de la organización que le tiene contratado.
Perfil del intraemprendedor
Según Gedesco, los intraemprendedores son un “perfil muy demandado en la actualidad por las empresas, debido a las ventajas y beneficios que puede generar para una corporación”.
En cuanto a los beneficios que pueden aportar destaca el de la eficiencia empresarial. Los intraemprendedores modernizan el trabajo, son capaces de sacar al resto de empleados de actividades rutinarias que quizás hoy día no son tan productivas.
Permiten, as u vez, explorar nuevos campos y generar beneficios, a través de la propuesta de nuevas líneas de negocio. Y es que entre sus funciones principales se encuentra la de reaprovechar los recursos de una organización para obtener beneficios en otras áreas.
Son profesionales fundamentales para aportar ideas innovadoras a la empresa. Dejan atrás los proyectos obsoletos que no contaban con la aportación de las nuevas tecnologías, son creativos y esto, unido al uso de las nuevas tecnologías les hace sacar el máximo rendimiento de cualquier proceso en el que participen.
Por otro lado, son profesionales que no tienen miedo. Se caracterizan por no tener miedo a recibir un no por respuesta. De él se espera que aporte y ofrezca soluciones originales y creativas. Disponen también de buena capacidad analítica, basándose habitualmente en cifras a la hora de razonar.
Son también muy persuasivos para que los modelos e innovaciones que pretenda implantar sean aceptados. En definitiva, son fundamentales para cualquier empresa.